martes, 27 de septiembre de 2011

2 días en Paris.....


Jack:No te conozco

Marion:De que hablas?¿ estás borracho.

J: Estaba sentado en el burguer ¿ vale? haciendo manitas con un angel antes de que el prendiera fuego al local

M:Un angel?¿

J:no era gay, era un angel del cielo o un vegetariano esquizofrénico quizá , odiaba la comida rápida .El caso es que me di cuenta de una cosa básica, no te conozco.

M:¿no me conoces?

J :No.

M:resumiré las cuatro horas de discusión que siguieron
No es fácil mantener una relación , ni mucho menos conocer verdaderamente a la otra persona y aceptarla tal como es con sus defectos y su pasado.
Jack me confesó su temor a ser rechazado si lo conocía de verdad, si se mostraba completamente desnudo.
Jack había comprendido después de estar dos años conmigo que no me conocía en absoluto , ni yo a el, y para amarnos verdaderamente teníamos que conocer la verdad el uno del otro aunque aveces sea difícil de asumir de modo que le dije la verdad : que nunca le había sido infiel , también le dije que había visto a Mathié aquella tarde , no se enfadó conmigo, porque no había pasado nada ,claro,.Le confesé a Jack que para mi lo más dificil es decidir estar definitivamente con alguien ,la idea de que es el hombre con el que voy a pasar el resto de mi vida ,decidir que voy a hacer el esfuerzo de seguir , de solucionar las cosas y de no huir em cuanto surge un problema me resulta muy difícil , le dije que no podía estar con un hombre el resto de mi vida aunque era mentira pero lo dije de todas formas , me preguntó si era una ardilla que cree que los hombres son frutos secos que se almacenan para el frío invierno, me pareció muy divertido , luego me dijo una cosa que me ofendió, el tono cambió drásticamente pero lo había entendido mal:Pense que quería decir que ya no me quería y que quería cortar conmigo , siempre me ha fascinado como las personas pueden pasar de amarse locamente a no sentir absolutamente nada , es muy doloroso.Cuando presiento que alguien me va a dejar tiendo a romper la relación antes de tener que pasar por eso.
Aquí está , una más, una menos , otra historia de amor desperdiciada.
A el lo quería de verdad , cuándo pienso que ha terminado,que nunca volveré a verlo , bueno sí, nos encontraremos casualmente y conoceremos al nuevo novio a novia del otro , nos comportaremos como si nunca hubieramos estado juntos , luego poco a poco pensaremos cada vez menos en el otro hasta que lo olvidemos completamente ,casi.
Siempre es igual , cortar , deprimirme , beber , tontear ,conocer a un tio tras otro y follar para olvidar al verdadero amor de mi vida , después al cabo de unos meses de vacio total volver a buscar al verdadero amor, buscar desesperadamente por todas partes y al cabo de dos años de soledad conocer a un nuevo amor y jurar que será el definitivo hasta que también vuelva a perderlo.
Llega un momento en la vida en el que no podemos recuperarnos de otra ruptura y aunque esa persona nos fastidie el sesenta por ciento del tiempo no podemos vivir sin ella, aunque se despierte todos los días estornudándonos en la cara , bueno, nos gustan más sus estornudos que los besos de cualquier otro.

....en guerra con mi alrededor.....


Decían que amar era volar. Nos conocimos por casualidad y entre citas por probar una nueva línea aérea y la curiosidad de unas risas compartidas en tierra pasamos de largo la puerta de embarque y no nos dimos cuenta del despegue. La siguiente vez que un amigo nos preguntó ya viajábamos a velocidad de crucero en un cielo de sábanas blancas y gemidos. Yo tu comandante tú mi copiloto. Dejamos que la pasión pusiera el piloto automático y volcamos las manos en otras batallas. El vuelo fue precioso: paradas en las islas del deseo, hicimos el amor entre nubes, ...por fin un acompañante de vuelo. Fue precioso el vuelo. Mucho peor el aterrizaje. Desatendimos las normas en caso de fallo y sin chaleco salvavidas nos ahogamos en un mar de dudas. Llegó un momento en que empezamos a viajar a 600 malentendidos por hora fallaron los motores la rutina es combustible para otros viajes. No hará falta buscar la caja negra entre el fuselaje para conocer las razones de nuestro fracaso. Supongo que tenía razón esa canción que hablaba de que un hombre y una mujer son como aviones de papel: vuelan por un tiempo pero al final tiene que caer. Pero siempre hay más aeropuertos siempre se puede aterrizar de emergencia en otro presente en otros ojos y no puedo evitar plantearlo. Ahora que te tengo enfrente quiero preguntarte si por algún casual aceptarías ser mi copiloto. Prometo que volaremos. Ya negociaremos otro día el aterrizaje.


Marwan